Los envíos lácteos nacionales tuvieron como principal destino Estados Unidos, Perú y México, destacando a su vez el avance de Rusia en el periodo.
En el caso de los tres primeros países, éstos alcanzaron una participación sobre el total de 21,5%; 14,9% y 11,2%, respectivamente. Mientras Rusia llegó a 9,5%, convirtiéndose en el cuarto destino de las exportaciones lácteas.
En términos comparativos, aunque bajaron 19,4% respecto de un año atrás, las exportaciones a Estados Unidos sumaron US$22,4 millones, mientras a Perú totalizaron US$15,6 millones, un 6,9% por debajo de igual periodo de 2018.
Por su parte, los envíos a México volvieron a terreno positivo con un incremento de 11,9% a US$ 11,6 millones, mientras a Rusia éstos alcanzaron los US$9,9 millones, un 25,9% por encima del año anterior.
Las exportaciones de productos lácteos fueron lideradas por la leche condesada por un valor total de US$27,2 millones, lo que supone una caída de 11,7% comparado con el año previo, y una participación dentro del total de 26,1%. En cuanto a su valor promedio, llegaron a US$1.655 por tonelada.
En segundo lugar se ubicaron los envíos quesos por un total de US$22,9 millones, representando un aumento de 35,3% en relación con igual periodo de 2018, y alcanzando una participación dentro del total de 21,9%. En términos su valor promedio, éste alcanzó US$4.319 por tonelada.
En tercera posición con el 18,1% dentro del total se posicionaron las exportaciones de preparaciones infantiles, con una variación de 49,1% menos comparado con el año pasado al sumar US$18,8 millones. Estos envíos promediaron un valor de US$3.829 la tonelada.