Antes de que comenzara la mutua aplicación de aranceles, el mercado chino era el de mayor crecimiento para el sector lácteo de EE.UU.
Pero desde julio de 2018 a julio de este año, las exportaciones lácteas a China cayeron un 42%.
Tras meses negando que la guerra arancelaria tuviera efectos sobre los productores estadounidenses, y ante la presión de éstos, la Casa Blanca anunció dos multimillonarios paquetes de ayuda financiera.
“No son la solución, lo hemos dicho en numerosas ocasiones”, sostuvo Castaneda.
Apuntó que el problema de fondo es “la necesidad de abrir nuevos mercados, algo que Europa está haciendo”, negociando acuerdos que “son ventajosos para ellos” como el recientemente alcanzado con Mercosur.
“Nos estamos quedando atrás al cerrar estos mercados con guerras comerciales”, lamentó.