El Sistema Integrado de Gestión de la Lechería Argentina (SIGLeA) publicó que el productor de leche cobró 15,38 pesos por cada litro. Este valor significó un incremento del 0,5% en relación a julio y un 107,6% con agosto de 2018.

A pesar de esa recomposición, en pesos del precio de la leche, los productores sostienen que tener los insumos en dólares complica la producción. El presidente de la Asociación de Productores de Leche (APL), Raúl Cata, comentó a Agrofy News: “Volvemos a la tercera crisis frente a una devaluación que tiene el sector”.

En este sentido, señaló que las devaluaciones no serían un problema si la industria siguiese la curva de los precios básicos de insumos, que son agrícolas. Además agregó que el 50% de la facturación es para alimentación que se refleja en precio de la soja, que es la fuente proteica básica, y el precio del maíz, que es la fuente de energía como forraje; lo que hace complicado con la devaluación. “Además se suma el alquiler, porque la mitad de la leche en argentina se hace en campo arrendado”, sostuvo Cata.

En junio de 2019 el productor recibió 15,42 pesos por litro, 23 centavos menos que en agosto; mientras que en el medio hubo un salto importante del dólar. A esta situación se suma el periodo que tardan las empresas en pagar por la leche al productor. “Hay industrias que pagan a corto plazo, las pyme tratan de pagar en un mejor lapso que las empresas grandes y pero estas terminan de pagar a 45 días”, aclaró el presidente de APL.

Con el precio que cerró agosto, Cata señaló que no se refleja ni la inflación. “El precio por lo menos tiene que reflejar la devaluación que hubo, tendría que estar en 17 pesos aproximadamente el precio de leche al tambero”, argumentó Cata.